En Chile existe un problema general y es que la simplicidad y la búsqueda de una explicación de forma lineal de un problema para encontrar su solución ha sido la regla general y se ha demostrado que esto no ha funcionado, pues de haber sido certero aquel análisis viviríamos una utopía y no hubiera existido 18 de Octubre 2019 y Estallido Social. No se ha entendido que las soluciones y los problemas no son unidimensionales en la Región de la Araucanía y que la política pública no debiese enfocarse en la búsqueda de soluciones de forma segmentada cuando el problema abarca de forma integral a la sociedad. No entender que los problemas son complejos, difusos y multidimensionales, es no profundizar y no problematizar en la búsqueda de una solución al problema y esto puede traer consecuencias nefastas en la implementación.
Entonces, debiese ser sabido que el problema no es solamente de violencia en la Región de la Araucanía. No se queman camiones porque existe un grupo empecinado de personas con la tendencia patológica hacia la piromanía y debiese ser sabido -por experiencia tras el asesinato a Camilo Catrillanca – que la solución no está en la constante y excesiva militarización de la región con fuerzas policiales que están en el limbo del desequilibrio ético y moral. Aquí el problema no es de violencia como el de las películas Western en donde vemos a vaqueros contra pieles rojas, sino que estamos frente a una complejidad más extensa que atraviesa lo social, político, cultural y hasta lo económico.
En consecuencia de lo anterior, es que al parecer la lógica de “cuando sólo tienes un martillo, todos te parecen clavos” vuelve a imponerse en la búsqueda de soluciones erradas, tanto de parte del Gremio de camioneros como del Gobierno de turno que con recetas añejas, sólo tributarán en la profundización de la polarización del conflicto.
Cristian De la Rosa Escobar
Estudiante Administración Pública y Cs. Políticas Universidad Austral de Chile.
Deja un comentario